Los usuarios cada vez compran menos iPhone de más almacenamiento

Un reciente informe publicado por Consumer Intelligence Research Partners (CIRP), ha evidenciado que en los últimos años se ha observado un cambio en los hábitos de compra de los usuarios en relación al almacenamiento de sus iPhones. Cada vez es más común que los usuarios opten por modelos con menor capacidad de almacenamiento en los iPhone, lo que ha generado un debate sobre las razones detrás de esta tendencia a la hora de elegir la capacidad de almacenamiento de su dispositivo.

Los números son indiscutibles. En el último trimestre, el 44 % de los compradores de iPhone 16 Pro y Pro Max actualizaron su dispositivo a un modelo con almacenamiento base, en comparación con el 48 % de los compradores de iPhone 15 Pro y Pro Max en el mismo trimestre del año anterior. Entre los compradores de iPhone 16 y 16 Plus básicos, el 42 % compró modelos con almacenamiento mejorado, también en comparación con los iPhone 15 y 15 Plus (48 %) en el mismo trimestre del año anterior.

Un iPhone de mayor almacenamiento ya no es la prioridad de muchos clientes

Existen diversos factores que pueden influir en la decisión de los usuarios de adquirir iPhones con menor almacenamiento.

Además, el precio de los iPhones con mayor almacenamiento suele ser significativamente más elevado, lo que puede ser un factor determinante para muchos usuarios. Ante la posibilidad de adquirir un modelo con menor capacidad a un precio más accesible y complementario el almacenamiento con servicios en la nube, muchos consumidores optan por esta opción más económica.

Para la mayoría de los modelos, el nivel de almacenamiento base es de 128 GB. Para el iPhone 16 Pro Max, el nivel de almacenamiento base es de 256 GB, y para el iPhone SE, el almacenamiento base es de 64 GB. Para los modelos insignia más nuevos y antiguos, los compradores pueden actualizar a 512 GB. El iPhone 16 Pro y Pro Max ofrecen hasta 1 TB y el iPhone SE llega a los 256 GB. Apple ofrece dos o tres opciones de mejora de almacenamiento para cada modelo, con recargos que van desde 100 a 600 euros.

Asimismo, el avance de la tecnología ha permitido que los dispositivos actuales ofrezcan un rendimiento óptimo incluso con capacidades de almacenamiento más modestas. Los procesadores y sistemas operativos han mejorado su eficiencia, lo que se traduce en un menor consumo de recursos y una gestión más inteligente del espacio disponible.

Por otro lado, los servicios de almacenamiento en la nube se han popularizado y ofrecen alternativas viables para aquellos usuarios que necesitan más espacio para guardar sus archivos, fotos y vídeos. Plataformas como iCloud, Google Drive o Dropbox permiten a los usuarios liberar espacio en sus dispositivos y acceder a sus contenidos desde cualquier lugar con conexión a Internet.

Este cambio de hábito evidencia el avance normal de la tecnología, la popularización de los servicios en la nube y el precio de los dispositivos como elementos que influyen en la decisión de compra de los usuarios. Lo interesante será conocer la estrategia de Apple para retener la ganancia de la venta de otros modelos y cómo adaptará los iPhone a las necesidades específicas de cada consumidor.

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