La nueva función de Face ID que ha patentado Apple parece de ciencia ficción

La seguridad biométrica llegó a nuestros dispositivos hace tan solo unos años, pero ahora parece que no podemos vivir sin ella. No solo resulta mucho más seguro que contraseñas o patrones, sino que es mucho más rápido. El iPhone, en su momento, fue de los primeros teléfonos en introducir la seguridad con huella dactilar de una forma práctica para el usuario con Touch ID. Después, lo volvieron a hacer con Face ID, capaz de ofrecer una alta seguridad mediante el reconocimiento facial.

Esta pandemia, sin embargo, nos ha enseñado que puede que depender de Face ID no sea lo más práctico. En un mundo en el que de repente nos vimos obligados a usar mascarillas fuera de nuestro hogar, su utilidad se ha reducido. Incluso, hay quien cree que es mejor dejarlo atrás para recuperar el Touch ID o apostar por otras tecnologías.

Patente de Apple acerca del uso de Face ID.

En el caso de Apple, parece que no tienen planes de dejar atrás Face ID. De hecho, una nueva patente indica que aún tienen planes para transformarlo en algo más que un método de desbloqueo. En un futuro, Face ID podría convertirse en una gran ayuda para personas con problemas de visión, ofreciendo la oportunidad de que el iPhone se adapte a nuestra vista, y no a la inversa.

En un documento compartido por BGR, Apple describe una nueva función que, usando la tecnología de Face ID, permitiría adaptar la pantalla del iPhone de acuerdo con la vista del usuario. Primero, el iPhone se encargaría de determinar si el usuario tiene alguna condición como miopía o astigmatismo, y después usaría los sensores de Face ID para conocer si está usando o no gafas en ese momento. De no hacerlo, el propio dispositivo adaptaría la interfaz de acuerdo con las necesidades visuales.

Esto, si bien ahora mismo no es más que una patente, podría resultar todo un avance en accesibilidad. Apple, que busca facilitar el uso de sus dispositivos para todos, podría lograr hacer algo más cómoda la vida de millones de personas. Incluso, podría ser clave para ofrecer aún más privacidad a los usuarios, con la capacidad de adaptarse a gafas con filtro polarizador para ocultar el contenido de la pantalla. Desde luego, se trata de una patente con grandes posibilidades, ojalá las suficientes para convencerles de su desarrollo.