El gran truco de Apple: un mago pierde su maleta en el aeropuerto y la recupera gracias a un AirTag
Los AirTags de Apple sí que son "mágicos"...
Los AirTags de Apple han salvado el día de muchas personas a lo largo de los últimos meses. El pequeño localizado de Apple ha ayudado a muchos usuarios a encontrar sus pertenencias e incluso a detener a ladrones. Y ahora han formado parte del "gran truco" de un mago llamado Danny Orleans.
Danny Orleans viajó desde Chicago hasta Newark con el fin de realizar un espectáculo de magia. Cuando aterrizó, de repente se dio cuenta de que el truco se lo habían hecho a él. La aerolínea United había hecho desaparecer su maleta.
El truco final de la maleta perdida
Desde Business Insider nos cuentan la curiosa historia de Danny Orleans, un mago que perdió la maleta en su viaje a Newark y pudo recuperarla gracias al AirTag de Apple.
El equipaje de Danny Orleans contenía un equipo de sonido para su espectáculo de magia que está valorado en 1.500 euros. Cuando aterrizó esperó a divisar su maleta en la cinta transportadora. Pero nunca apareció. Había desaparecido como por arte de magia.
Afortunada y convenientemente, Danny había acoplado un AirTag en su maleta por lo que se apresuró a localizar el equipaje desde su iPhone. La red Buscar Mi le mostró la ubicación exacta de su maleta y, para su sorpresa, se encontraba en el aeropuerto de Newark.
Estuvo hablando con el servicio de atención al cliente del aeropuerto y le dijeron que "la maleta no estaba en Newark" ya que no había sido registrada. El mago mostró al empleado la ubicación de la maleta en su iPhone y, aunque le ofrecieron enviársela al hotel cuando la encontraran, decidió proseguir con su búsqueda.
Analizando la ubicación del AirTag de la maleta, se cercioró de que debía encontrarse en algún punto cerca de la puerta de embarque 90. Pero tenía un problema: la única forma de llegar hasta su maleta era comprando un nuevo billete de avión. No dudo ni un instante y compró otro vuelo.
Pasó a través de los sistemas de seguridad y llegó a la puerta 90 del aeropuerto. Observó a través del ventanal y... ¡ahí estaba!, en plena pista, en medio de la nada.
"Estaba ahí tirada en la pista. Lo más frustrante de todo es que alguien caminó justo al lado de la maleta mientras estaba observando, y simplemente pasó de ella, como si no fuera su trabajo recogerla."
El intrépido mago explicó la situación a un empleado de la aerolínea, que amablemente fue a la pista para salvar el día. Una bonita historia de magia con final feliz.
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