El iPad sigue demostrando al mundo cómo debe ser la tablet perfecta tras 13 años dominando el mercado

Pocos productos hay tan consolidados en el mercado como el iPad de Apple. Lleva dominando el sector de las tabletas desde hace muchísimos años y ha sabido madurar y evolucionar hasta convertirse en una herramienta indispensable, versátil, productiva y casi mágica. El iPad de Apple ha demostrado con creces que es la mejor tablet del planeta.

Recientemente realizábamos un profundo análisis del iPad (2022) de 10ª generación descubriendo que la tablet recogía las mejores características de cada modelo de iPad. Apple ha dotado a cada modelo de ciertos factores destacados que las convierten en tesoros únicos. El iPad Air es ligero, el iPad mini es pequeño y el iPad Pro es potente. Pero todos ellos ofrecen un gran rendimiento e incluso algunos de ellos, como sucede en el caso del iPad Pro de 2018 siguen ofreciendo una gran funcionalidad después de 5 años de actualizaciones.

Una auténtica revolución desde sus inicios

El éxito del iPad es rotundo a día de hoy, pero en sus inicios la tablet de Apple fue criticada y vilipendiada por los rivales de la competencia. Hoy en día, nadie puede negar que el iPad es la mejor tablet del mercado.

Por otro lado, en el ámbito de los smartphones, los smartwatches y otros wearables, no podemos encontrar un líder tan dominante como el iPad. Sí, Apple y Samsung dominan con puño de hierro en estos sectores de mercado, pero no con una diferencia tan amplia como lo hace el iPad.

Sí que es cierto que hay maravillosas alternativas al iPad (y mucho más baratas) pero ninguno se le acerca a la calidad del iPad. Es imposible ni tan siquiera nombrar un competidor medianamente válido.

Una evolución repleta de cambios

El iPad de Apple ha cambiado tanto por dentro como por fuera. Las mejoras que se han ido implementando entre sus componentes de hardware han ido moldeando y perfeccionando las funciones de software de su sistema operativo que se transformó de iOS a iPadOS hace algunos años.

Empezando por la renovación de su diseño con los biseles laterales más reducidos y la retirada del botón de inicio, el iPad ha sufrido muchos cambios a lo largo de esta década. Su peso es cada vez más liviano, su pantalla es cada vez más brillante y otros elementos como su puerto USB-C también han cambiado. Ahora cuentan con tecnología ProMotion, Face ID (iPad Pro) y hasta escáneres LiDAR.

Crónica anunciada de la muerte de la innovación

De la misma forma en la que el teléfono móvil tradicional con teclas físicas y pantalla diminuta murió, también lo hará el iPad. Todos los dispositivos electrónicos que hemos inventado acaban muriendo algún día. Es la ley de vida en el campo de la tecnología. Llamémoslo obsolescencia programada o llamémoslo que simplemente existe un límite en la capacidad de innovación.

El iPad ha llegado a un punto en el que, bajo términos tecnológicos, ya no puede mejorarse mucho más. Apple te dirá que ha implementado un procesador más potente, que ha mejorado sus cámaras (no son realmente tan necesarias en una tablet) y que han introducido alguna que otra nueva función de software. Pero, en realidad, el único margen de mejora posible en el iPad reside en su pantalla, al menos en el caso de los modelos de iPad más avanzados hasta la fecha.

Se rumorea que Apple tiene planeado desarrollar un iPad Pro con pantalla OLED en 2024, muchos consumidores actualizarán sus tabletas pero será a partir de entonces cuando el iPad Pro ya no tenga la capacidad de seguir mejorando simplemente por falta de innovación tecnológica. Pero, con un poco de suerte, mutará hacia otro tipo de tablet flexible, plegable u otras características futuristas que lo permitirán renacer. Hasta que suceda esto, el iPad ha demostrado al mundo entero cómo tiene que ser una tablet perfecta, durante más de una década.